Poema inspirado en la novela LAS VÍRGENES DEL PARAÍSO de Barbara Wood:
Yo, un oficial del ejército inglés,
esperaba al jeep que tenía que venir a recogerme.
Junto a una farola,
un cigarro encendía
y al levantar la vista
entre el enrejado de madera con tus ojos me crucé.
Tu mirada oscura
entre el velo que la cara te cubría
parecían dos estrellas arrancadas a la noche
en esa casa rosada con forma de media-luna egipcia.
1946, final de la 2ª Guerra Mundial,
el camión de los soldados se acercaba
y detrás, mi caravana.
Una rosa Siria vi volando por encima de la tapia.
Tu me la tiraste, apasionada
y esperaste a que entre mis dedos se prendiera
y que la oliera,
y sin darme cuenta, la besé.
En ese momento pensé
que era a ti a quien besaba
Y tu, Nefissa, mujer, joven viuda y madre,
silenciosamente callabas a ese corazón palpitante
al verme subir vacilante
y en las calles polvorientas de El Cairo
perderme...
Dejando atrás la colilla de un cigarro.
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