MORIR DE AMOR
No hay muerte más dulce
que aquella muerte de amor.
Es aquella sensación
de estar con las manos
abrazadas a los barrotes de un corazón
que se muere y no puede
resucitar.
Morir de amor, aaahhh,
qué sensación más tonta,
y mágica, y catatónica,
yo diría que es casi casi
una droga alúcinógena
que hace ver diferentes cosas
cuando la razón más lógica
dice que no.
Es sentir que el alma se despega
de su cuerpo y que navega
por los cielos en tu busca.
Convertir a los dioses en demonios,
hablar con el mismo Lucifer
y prometerle serle fiel
aunque la pierdas.
Echar una moneda al Pozo de los Deseos
y desear que acabe el tormento
que te hace enloquecer.
Morir de amor,
es dejarlo todo
al olvido de todo,
al espacio vacío,
al invierno duro y frío
a la locura de ver con amargura
su mirada fija en ti
y nadie dice nada
pero algo muy dentro
arde en llamas
quemando la vela que te da la vida
y dejando cenizas en un papel.
COMUNERO
3 comentarios:
Wooow Comu, que bello e intenso este poema.
Morir de amor debe ser algo que nos ocurre a diario cuando nos enamoramos y dejamos la vida en un beso o en fragmentos de un abrazo.
Vaciar todos los sentimientos, hasta quedar suspendido en un filo del tiempo y flotar...flotar en el limbo que nos deja un TE QUIERO.
Morir de amor para resucitar de nuevo porque el amor tiene eso, te mata y te revive al mismo tiempo.
Un besote mi amigo
Cecy
Muchísimas gracias LUCIÉRNAGA por tu visita, es como tener aquí la compañía de una amiga, aunque esté lejos.
Me alegra verte, de verdad. Espero que todo vaya fenomenal por allá.
Un abrazote grandiooooso (sin romper costillas ehh?)
AAAAUUUUUMMMMMMFFFFFFFFFFFMMMUUAAKK
Gracias a ti Comu, ya sabes que siempre estaré cerquita pues somos amigos cómo el zorro y el Principito.
"uno es siempre responsable de lo que domestica"
Besotes compañero
Cecy
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