
A CHANGE IS GONNA COME
Joer, no sé a ustedes
pero yo a veces, oigo una canción
y creo que DIOS existe.
Escucho los compases
tranquilos y vacilantes, y me dejo llevar
como si entrara en un jardín,
en un paraíso encantado,
en un sitio de mucha luz
donde las flores y los pájaros
no paran de dar sus perfumes y piar.
Y veo caras felices.
Veo a mis padres, a mis
hermanos, a todos aquellos
que se fueron y ya no están
y lloro.
Lloro de felicidad.
Por volverlos a ver,
por sentir que no se han marchado
que siguen estando como yo los conocí
contentos, recibiéndome con los
brazos abiertos,
y me emociono.
Ya sé que estoy soñando, pero
es gracioso lo que te puede ayudar
escuchar una canción
que, sin querer, parece que
te hace más pequeño y más humilde.
COMUNERO
Joer, no sé a ustedes
pero yo a veces, oigo una canción
y creo que DIOS existe.
Escucho los compases
tranquilos y vacilantes, y me dejo llevar
como si entrara en un jardín,
en un paraíso encantado,
en un sitio de mucha luz
donde las flores y los pájaros
no paran de dar sus perfumes y piar.
Y veo caras felices.
Veo a mis padres, a mis
hermanos, a todos aquellos
que se fueron y ya no están
y lloro.
Lloro de felicidad.
Por volverlos a ver,
por sentir que no se han marchado
que siguen estando como yo los conocí
contentos, recibiéndome con los
brazos abiertos,
y me emociono.
Ya sé que estoy soñando, pero
es gracioso lo que te puede ayudar
escuchar una canción
que, sin querer, parece que
te hace más pequeño y más humilde.
COMUNERO