SUEÑO TUS LABIOS
Sueño siempre que respiro
cerca de una boca suave
y en esos momentos me digo
quién será, quien será.
Y sueño con unos labios
delgados o abultados,
colorados como amapolas
con estrías y agujeros en los mofletes
al reír.
Y me dan un calorcito tan bueno,
tan limpio y tan reconfortante,
que pienso que para qué despertar,
para qué marcharme de aquí,
si aquí se está fenomenal.
Y no levanto la vista,
me hago el dormilón,
rezongueo como un niño o
como los cachorros de algún animalito
que se pueden guardar en las manos
con la cabeza fuera para poder ver
lo que pasa
lo que ocurre
lo que se mueve
y lo que me llama
la atención.
Como si estuviera en una atalaya
vigilando.
Y me gusta oír su respiración
y que se choque el aire de esa boca contra mi cara,
sobretodo por las mañanas,
y, bueno, porqué no, por las noches también.
Me gusta soñar con unos labios
aunque no sepa de quién,
ni los haya visto, ni los conozca,
ni hayamos hablado nunca, ni vayan nunca a volver.
Pero mira tu,
hoy me ha dado por soñar
y parece que mi boca se ha enamorado de soñar tus labios.
COMUNERO
2 comentarios:
WAo! me dejo..estupefacta..con esto..estuvo..tal cual en algun momento lo pense..describiste...lo que algun d{ia Soñé...
Eyy, MAYITA, me alegro que a ti también te pase porque a veces, (muchas veces) pienso que es a mí solamente.
Muchas gracias por pasar por aquí.
*He estado viendo tu blog y me parece realmente grandioso el trabajo al que te dedicas. Mis respetos y todo el ánimo con ello.
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